El rey tenia que elegir entre cinco personas para encontrar a su consejero y los sometió a una prueba, que consistía en sacar una rosa de un jarrón sin romper ningún pétalo.
El primero, hizo un agujero y tiró de la rosa, pero rompió muchos pétalos.
El segundo, lleno el jarrón de agua para sacar la rosa y la estropeo.
El tercero, se quedo mirando el jarrón y no consiguió sacar la rosa.
El cuarto, hizo dos agujeros pequeños pero también rompió la rosa al sacarla.
Y el quinto, cogió un martillo, y rompió el jarrón, sacó la rosa intacta.
Cuando el rey tubo que elegir a uno, se decanto por el quinto.
Cuando todos le preguntaron, porque había elegido al quinto, que había destrozado el jarrón que era una reliquia de la antigüedad el emperador contesto que buscaba a una persona que sabia tomar decisiones importantes
y no le importaba el jarrón si no lo que había dentro, que era la rosa. Por que la rosa es mi pueblo y necesito a alguien que tome decisiones.
~ No sé exactamente el escritor de esta historia, me la contó mi tío .
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